Curia Romana

EN EL NOMBRE del Padre, X del Hijo y del Espíritu  Santo. Amén.

S. Entraré al altar de Dios
M. Hasta Dios, que alegra mi juventud.

YO pecador, etc.

DIOS todopoderoso tenga misericordia de ti, y perdonados tus pecados, te lleve a la vida eterna.

S. Así sea

                Todos:

                Todos:

YO, pecador, me confieso a Dios todopoderoso, a la bienaventurada siempre Virgen María, al bienaventurado San Miguel Arcángel, al bienaventurado San Juan Bautista, a los santos Apóstoles San Pedro y San Pablo, a todos los Santos y a vos, Padre; que pequé gravemente con el pensamiento, palabra, y obra, (dándose tres golpes de pecho) por mi culpa, por mi culpa, por mi grandísima culpa.

Por tanto, ruego a la bienaventurada siempre Virgen María, al bienaventurado San Miguel arcángel, al bienaventurado San Juan Bautista, a los Santos Apóstoles San Pedro y San Pablo, a todos los Santos, y a vos, Padre, que roguéis por mí a Dios nuestro Señor.

 

 

 

DIOS todopoderoso tenga misericordia de vosotros, y

perdonados vuestros pecados, y os  lleve a la vida eterna.

M. Así sea


EL Señor todopoderoso y misericordioso nos conceda la absolución  y el perdón de nuestros pecados.
M. Así sea.
S. Oh Dios, vuélvete a nosotros y nos darás la vida.
M. Y tu pueblo se alegrará en Ti.
S. Muéstranos, oh Señor, tu misericordia.
M. Y sálvanos.
S. Señor, escucha mi oración.
M. Y mi clamor llegue hasta Ti.
S. El Señor sea con vosotros.
M. Y con tu espíritu.

EL CELEBRANTE SUBE AL ALTAR

Obtenido con todo esto el beneplácito del Señor, el sacerdote junta las manos, y, subiendo las gradas del altar, besa la piedra del mismo (la piedra del Sacrificio o piedra sagrada).
Este beso al altar, significa el respeto, la veneración, el amor del Sacerdote por Jesucristo, representado por el altar.
La piedra del altar, siempre contiene las reliquias de Santos Mártires. Besando el altar, el Sacerdote muestra su unión con todos los Santos glorificados, reunidos en Christo, su Señor, y nos recuerda la obligación de ofrecernos, de inmolarnos como los Santos, si es que verdaderamente queremos participar del Sacrifico de Jesucristo.

E inclinado sobre el altar, continúa diciendo:

Oramus te, Domine, per merita Sanctorum tuorum, quorum, reliquiae hic sunt, et omnium Sanctorum: ut indulgeris omnia peccata mea. Amen

Rogámoste, Señor, que por los méritos de tus Santos, cuyas Reliquias están aquí (y besa el altar), y por los de todos los Santos, te dignes perdonarme todos mis pecados. Así sea.

 

S. Kyrie, eléison.

M. Kyrie, eléison.

S. Kyrie, eléison.
M. Christe eléison.

S. Christe eléison.

M. Christe eléison.

S. Kyrie, eléison.

M. Kyrie, eléison.

S. Kyrie, eléison.

GLORIA A DIOS EN LOS CIELOS y en la tierra paz a los hombre de buena voluntad.

Te alabamos. Te bendecimos. Te adoramos. Te glorificamos. Te damos gracias por tu grande gloria. Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre Omnipotente. Señor, Hijo unigénito Jesucristo. Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre. Tú que quitas los pecados del mundo, ten piedad de nosotros. Tú, que quitas los pecados del mundo, recibe nuestra suplica. Tú, que estás sentado a la diestra de Dios Padre, ten piedad de nosotros. Porque Tú sólo eres santo. Tú el sólo Señor. Tú el sólo Altísimo, Jesucristo. Con el Espíritu Santo (hacen la señal de la cruz)  X en la gloria de Dios Padre. Amén.

S: El Señor sea con vosotros.

M: Y con tu espíritu.

S: Oremos...

S: El Señor sea con vosotros.

M: Y con tu espíritu.

S: XContinuación del santo Evangelio según N...

M: Glorificado seas, oh Señor.

Credo in unum Deum Patrem omnipotentem, factorem coeli et terrae, visibilium omnium et invisibilium. Et in unum Dominum Jesum Christum, Filium Dei unigenitum. Et ex Patre natum, ante omnia saecula. Deum de Deo lumen de lumine, Deo verum de Deo vero. Genitum non factum, consubstantialem Patri; per quem omnia facta sunt. Qui propter nos homines et propter nostram salutem descendit de coelis. Se arrodillan todos.

ET INCARNATUS EST DE SPIRITU SANCTO EX MARIA VIRGINE: ET HOMO FACTUS EST. Crucifixus etiam pro nobis sub Pontio Pilato passus, et sepultus est. et resurrexit tertia die, secundum Scripturas. Et ascendit in coelum; sedet ad dexteram Patris. Et iterum venturus est cum gloria judicare vivos et mortuos; cujus regni non erit finis. Et in Spiritum Sanctum, Dominum et vivificantem: qui ex Patris Filioque procedit. Qui cum Patre et Filio simul adoratur, et conglorificatur; qui locutus est per Prophetas. Et unam sanctam, catholicam et apostolicam Ecclesiam. Confiteor unum baptisma in remissionem peccatorum. Et expecto resurrectionem mortuorum. Et vitam venturi  X saeculi. Amen.        

Creo en un solo Dios Padre todopoderoso. Creador del cielo y de la tierra, de todas las cosas visibles e invisibles. Y en un solo Señor, Jesucristo. Hijo unigénito de Dios. Y nacido del Padre, antes de todos los siglos. Dios de Dios, luz de luz, Dios verdadero de Dios verdadero. Engendrado, no formado; consubstancial al Padre, y por quien todo ha sido creado. El mismo que por nosotros los hombres y por nuestra salvación bajó de los cielos.

Se arrodillan todos.

Y SE ENCARNÓ POR OBRA DEL ESPÍRITU SANTO, EN LAS ENTRAÑAS DE LA VIRGEN MARÍA Y SE HIZO HOMBRE. Fue también crucificado por nosotros bajo el poder de Poncio Pilatos; padeció y fue sepultado. Y resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras. Y subió al cielo y está sentado a la diestra del Padre. Y otra vez vendrá con gloria a juzgar a los vivos y a los muertos, y su reino no tendrá fin. Creo también en el Espíritu Santo, Señor y vivificador, el cual procede del Padre y del Hijo. Quien con el Padre y el Hijo, es al mismo tiempo adorado y glorificado, el cual habló por boca de los profetas. Creo en la Iglesia, Una, Santa, Católica y Apostólica. Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados. Y espero la resurrección de los muertos y la vida (hacen la señal de la cruz) Xdel siglo venidero. Así sea.

+ Ad Maiorem Dei Gloriam +

Esta página es obra de La Sociedad Pro Misa Latina -Una Voce Cuba-

TODOS  LOS DERECHOS RESERVADOS.

Comentario: La Misa de San Pío V a la que vamos a asistir,  tiene mas de 1000 años de existencia y ya se encuentra codificada en lo esencial desde el siglo VI. Su perennidad proviene del hecho que expresa el misterio Eucarístico en forma íntegra. El celebrante al dejarse conducir por este rito obra no movido por si mismo sino como ministro de Cristo y de la Iglesia.

 

ORDINARIO DE LA MISA
PRIMERA PARTE:

MISA DE LOS CATECUMENOS.

 

La primera parte de la Misa va del comienzo al Ofertorio. Es la Misa de los Catecúmenos. Sirve de preparación al Santo Sacrificio propiamente dicho.
Nos preparamos por medio de la Oración, la Alabanza y la Instrucción.
Oraciones: Oraciones al pie del altar. - Kirye. - Oraciones.
Alabanza: Introito. - Gloria. - Gradual. - Aleluya.
Instrucción: Epístola. - Evangelio. - (Sermón). - Credo

 

MISA DE LOS CATECÚMENOS
1. - Ejercicio preparatorio. De rodillas
Una vez que el Celebrante ha preparado el Cáliz en el altar y ha registrado el Misal, baja las gradas, hace la genuflexión al Santísimo Sacramento encerrado en el Sagrario y empieza con la señal de la Cruz, diciendo (y todos los asistentes con él):

 

IN NOMINE Patris, X et Filii, et Spiritus Sanctis. Amen.

 

El Sacerdote recita alternadamente con el monaguillo, el salmo Júdica me, que expresa la tristeza, la confianza y la alegría: Tristeza por vivir en la tierra del exilio, en medio de un mundo corrupto y enemigo de Dios, expuestos al pecado. Confianza en la misericordia Dios Padre, cuyo Hijo Jesús ha muerto para expiar nuestros pecados, y que nuevamente sobre el altar va a pedir perdón por nosotros.
Finalmente alegría, al pensar en subir al altar, después de haber obtenido la paz de una buena conciencia.
Este es el sentimiento de alegría que debe dominar en nosotros cada vez que
asistimos a Misa. La asistencia a Misa debe ser para nosotros una dulce obligación, sobre todo los domingos.

 

Comentario: En vuestro Santo Nombre, !oh adorable Trinidad! Para rendiros el culto, adoración y honra que os son debidos, comienza este santo  y augusto sacrificio. Nuestras intenciones se unen a las de la Iglesia, para ofreceros la víctima saludable.

El alma se llena de profunda gratitud, piedad, amor y reverencia al encontrase místicamente al pie del Calvario.


S. Introíbo ad altare Dei.
M. Ad Deum qui laetificat juventutem meam.                 

 

SALMO 42
Se omite en las Misas de Difuntos y en las feriales Ps. 42, 1-5

 

JUDICA me , Deus, et discerne causam meam de gente non sancta: ab homine iniquo, et doloso erue me.
M. Quia tue es, Deus, fortitudo mea: quare me repulisti et quare tristis incedo dum affligit me inimicus?
S. Emitte lucem tuam, et veritatem tuam: ipsa me deduxerunt, et adduxerunt in montem sanctum tuum, et in tabernacula tua
M. Et introíbo ad altare Dei: ad Deum qui laetificat juventutem meam.
S. Confitebor tibi in cithara Deus, Deus meus: quare tristis es, anima mea, et quare conturbas me?
M. Spera in Deo, quoniam adhuc confitebor illi : salutare vultus mei, et Deus meus.
S. Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto.
Monaguillo: Sicut erat in principio, et nunc, et semper; et in saecula saeculorum. Amen.
S. Introíbo ad altare Dei.
M. Ad Deum qui laetificat juventutem meam.
S. Adjuctorium nostrum in nomine Domini.
M. Qui fecit caelum et terram.

 

 

 

Acto de Contrición y Absolución

Para acercarnos a Dios debemos humillarnos y reconocernos públicamente pecadores, rezando, después del Celebrante, el Acto de contrición, y recibiendo de él la absolución de las faltas veniales.

 

Comentario: ?Ves al sacerdote ahora profundamente inclinado?  Prepara ahora su alma para celebrar mas dignamente los misterios del altar. Desde este momento únete a el. Repasa con sentimiento de corazón los pecados que haz cometido. Trae, a la memoria aunque sea en general aquellos pecados que mas te humillan . Expón a Dios tus miserias y pídele que las perdone, y que mediante este sacrificio; abismo de sus misericordias, te saque el de tus fragilidades y

miserias.

 

 

 

 

CONFITEOR Deo…

 

MISEREÁTUR  tui omnipotens Deus, et dimissis peccatis tuis, perducat te ad vitam aeternam.

S. Amen.

 

 

 

CONFITEOR Deo omnipoténti, beatae Mariae semper Vírgini, beáto Michaéli Archángelo, beáto Joánni Baptístae, Sanctis Apóstolis Petro et Paulo, ómnibus Sanctis, et tibi Pater; quia peccavi nimis cogitatióne, verbo et ópere, (dándose tres golpes de pecho) mea culpa, mea culpa, mea máxima culpa.

Ideo precor beátam Maríam semper Vírginem, beátum Michaélem Archágelum, beátum Joánnem Baptístam, sanctis Apóstolos, Petrum et Paulum, omnes Sanctos, et te Pater, oráre pro me ad Dóminum Deum nostrum.

 

 

 

 

MISEREÁTUR vestri omnipotens Deus, et dimissis peccatis vestris, perducat te ad vitam aeternam.

M. Amen.

 

 

 

 

 

INDULGENTIAM , absolutiónem, et remissiónem peccatórum nostrórum, tribuat nobis omnípotens, et miséricors Dóminus.
M. Amen.
S. Deus, tu convérsus vivificábis nos.
M. Et plebs tua laetábitur in te.
S. Osténde nobis, Dómine, misericórdiam tuam.
M. Et salutáre tuum da nobis.
S. Dómine, exáudi oratiónem meam.
M. Et clamor meus ad te véniat.
S. Dóminus vobíscum.
M. Et cum spíritu tuo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Cuadro de texto: Mientras asciende al Altar el sacerdote dirá en silencio la oración: “Aufer a nobis.”

 

 

Aufer a nobis.

 quaesumus, Domine, iniquitates nostras: ut ad Sancta Sanctorum puris mereamur mentibus introire. Per Christum Dominum nostrum. Amen

 

 

 

PRIMERA INCENSACIÓN

(Se omite en las misas rezadas y en las cantadas de Difuntos)

El diácono presenta al Celebrante la naveta con el incienso y le pide que lo bendiga, diciendo:

 

 

 

D: Benedicite, Pater reverende.

Sacerdote: Ab illo bene X dicaris, in cujus honore cremaberis.

Amen.                   

 

 

 

 

El humo del incienso simboliza la oración de los Santos, y la nuestra, que sobre todo durante la Misa debe dirigirse hacia Dios igual que el incienso que se eleva al cielo.

La incensación del altar es un homenaje de adoración a la Majestad divina, y una señal de reverencia a las reliquias de los Santos y al mismo altar.

Antes de incensar, el Sacerdote, en honor de la Santísima Trinidad, pone en tres veces el icienso en el fuego del incensario, y lo bendice haciendo el signo de la Cruz. Después, inciensa primero la Cruz del altar, después las reliquias del mismo, y después al altar. Seguidamente, es incensado tres veces el Sacerdote, porque él representa a Jesucristo y es el Ministro de Dios.

 

El Celebrante se dirige al  lado derecho del altar (lado de la Epistola) donde se encuentra el Misal para rezar el Introito, que pertenece a las partes invariables de la Misa.

 

2. - Introito

(Cambia cada día y se encuentra en el Propio del Misal)

Los fieles siguen de rodillas

3. - Kyries y Gloria

El Celebrante va al centro del altar, y dice(3 veces) alternando con el pueblo.

 

Comentario: Hacemos fervorosos actos de confianza, en la bondad de Dios , quien permitiéndonos emplear un medio tan eficaz como este para pedirle la gracia de nuestra reconciliación , nos da al mismo tiempo una prenda segura de poder alcanzarla.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Cuadro de texto: En el momento del Gloria todos se  unen al Celebrante diciendo:

 

 

Cuadro de texto: GLORIA IN EXCELSIS DEO , et in terra pax hominibus bonae voluntatis. Laudamuste. Benedicimus te. Adoramuste te. Glorificamus te. Gratias agimus tibi propter magnam gloriam tuam. Domine Deus, Rex coelestis, Deus Pater omnipotens. Domine Filii unigenite Jesu Christe, Domine Deus, agnus Dei, Filius Patris, Qui tollis peccata mundi, miserere nobis. Qui tollis peccata mundi, suscipe deprecationem nostram. Qui sedes ad dexteram Patris, miserere nobis. Quoniam tu solus sanctus. tu solus altisimus Jesu Christe. Cum Sancto Spiritu  X in gloria Dei Patris. Amén.

 

 

Comentario:  El gloria que ahora reza el sacerdote es el himno de la mañana: es una alabanza y una plegaria. Comenzado por los Ángeles en la noche de navidad y continuado por los primeros cristianos, ha constituido siempre una delicia para los corazones fieles. Concebir un gran deseo de procurad a Dios toda la gloria y al prójimo todo el bien que pudiéramos. Nos alegramos con los Ángeles por la parte que tenemos en el conocimiento de los sagrados misterios. Llenos de altas y magnificas ideas acerca de la majestad de Dios y de su Hijo Jesucristo.

 

S: Dominus vobiscum.

M: Et cum spiritu tuo.                             

S: Oremus

 

 

 

 

4. - Oración-Colecta

(Cambia cada día y se encuentra en el Propio del Misal)

 

Puede haber dos, tres o más "Colectas", según el rito y la categoría de la fiesta. Los fieles pueden contentarse con la primera, que es la principal.

 

5. - 1ª Lectura bíblica: La Epístola

(Cambia cada día y se encuentra en el Propio del Misal)

Terminada la epístola responde el Diácono: Deo Gratias.)

 

Comentario:  Transportados en espíritu al tiempo de los patriarcas y profetas que no suspiraban sino por el Mesías , deseamos albergar sus mismos deseos, sentimientos y afectos. El termino de nuestras esperanzas es el mismo Salvador; pero nosotros mas felices que ellos, pues sabemos que ha llegado y que muy pronto se hará presente en el Altar

 

6. - Salmodia: Gradual - Aleluya -Tracto

(Cambia cada día y se encuentra en el Propio del Misal)

 

7. - 2ª Lectura bíblica: El Evangelio

(Cambia cada día y se encuentra en el Propio del Misal)

No atreviéndose a poner en sus labios la palabra de Dios sin antes purificarlos convenientemente, el Celebrante (y en las misas cantadas el Diácono), reza en silencio el “Munda cor meum.”. Breve oración preparatoria con la que también los fieles se han de disponer para leer el Evangelio.

 

Comentario:  El Evangelio que se va a leer es la regla de nuestra fe y costumbres como tal lo hemos de considerad . Regla que Jesucristo mismo dicto y que en los votos del bautismo hemos prometido seguir . Regla que si guardamos mal seremos juzgados estrechamente y sin apelación.

 

Munda cor meum, ac labia mea,

omnipotens Deus, qui labia Isaiae

Prophetae calculo mundasti ignito,

ita me tua grata miseratione dignare

mudare, ut sanctum Evangelium tuum

digne valeam nuntiare. Per Christum

Dominum nostrum. Amen.

 

Jube, Domine, benedicere Dominus

sit in corde meo et in labiis meis ut

digne et competenter annuntiem

Evangelium suum. Amen.

 

 

De pie

S: Dominus vobiscum.

M: Et cum spiritu tuo.

S: XSequentia sancti Evangelii secundum N...

M: Gloria tibi, Domine.                             

 

 

Sigue la lectura o canto del Evangelio del día. Todos lo escuchan de pie. al terminar de leerlo, el Sacerdote besa el Misal en señal de respeto. Terminado el Evangelio, se responde: Laus tibi Christi

 

8. - Credo

(Se dice todos los domingos, fiestas de precepto, fiestas de Nuestro Señor, de la Virgen, de los Apóstoles, de los Doctores, etc.)

Ahora rezan todos los asistentes, con el Celebrante, la siguiente solemne profesión de fe.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Comentario:  Al recitar el Credo manifestamos nuestra fe la cual se aviva al pronunciar los sagrados dogmas. Todo lo que la Iglesia nos manda a creer se funda en la palabra de Dios, anunciada por los profetas, revelada en la Sagrada Escritura , comprobada por los milagros, verificada  en el establecimiento de la fe, confirmada por los mártires y demostrada sensiblemente por la santidad de nuestra religión , y por la sólida alegría de los que le observan con fidelidad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Borra, oh Señor, nuestras iniquidades, para que merezcamos entrar con pureza de corazón al Santo de los Santos, por Jesucristo Nuestro Señor. Así sea.

D: Y mi clamor llegue hasta Ti.

Sacerdote: Bende X cido seas por Aquél en cuyo honor vas a ser quemado. Así sea.

S.¡Señor, ten piedad de nosotros!

M.¡Señor, ten piedad de nosotros!

S.¡Señor, ten piedad de nosotros!

M.¡Jesucristo, ten piedad de nosotros!

S.¡Jesucristo, ten piedad de nosotros!

M.¡Jesucristo, ten piedad de nosotros!

S.¡Señor, ten piedad de nosotros!

M.¡Señor, ten piedad de nosotros!

S.¡Señor, ten piedad de nosotros!

Purifica mi corazón y mis labios,

oh Dios todopoderoso, Tú que purificaste

con una brasa los labios del Profeta Isaías,

y dígnate por tu misericordia purificarme

a mí de tal modo que pueda anunciar

dignamente tu santo Evangelio.

 Por Jesucristo N. S. Así sea.

 

Dígnate, Señor, bendecirme.

El Señor esté en mi corazón y en mis labios, para que pueda anunciar digna y competentemente su Evangelio. Así sea.

S: Dominus vobiscum.

M: Et cum spiritu tuo.                             

 

S: El Señor sea con vosotros.

M: Y con tu espíritu.

ORDINARIO DE LA MISA
SEGUNDA PARTE:

MISA DE LOS FIELES.

 

1ª DIVISIÓN - EL OFERTORIO

Los hombres han hecho siempre ofrendas a Dios para conseguir el perdon de los pecados y las demas gracias que les convienen. En la santa Misa ofrecemos a Dios lo mas precioso, a saber: el Cuerpo y la Sangre de Jesucristo . Y antes ofrecemos el Pan y el vino que se han de consagrar.
9. - El Ofertorio
(Cambia cada día y se encuentra en el Propio del Misal)

 

Comentario: Consideremos la dicha incomparable que tenemos al hallar en este sacrificio un medio adecuado de honrar a Dios cumplidamente, darle gracias que igualen a sus dones , borrar enteramente nuestros pecados y obtener así las gracias que necesitamos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Después el sacerdote , haciendo la señal de la cruz con la patena y la hostia, coloca la hostia sobre el corporal. Vierte en el Cáliz un poco de vino con unas gotas de agua, símbolo el vino de la Divinidad y el agua de la Humanidad. Jesús, Hijo de Dios, Dios y Hombre, va a ofrecerse sobre el altar, y, con Él, se ofrecerán, unidos al Celebrante, todos los asistentes.

Todos los fieles, junto con Jesucristo, formamos un cuerpo misterioso, un cuerpo místico: Jesucristo es la cabeza y nosotros los miembros.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

11. - Ofrecimiento del Cáliz

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

12. - Ofrecimiento del Sacerdote y de los fieles

Después el sacerdote , haciendo la senal de la cruz  con el Cáliz y colocándolo sobre el corporal , lo cubre con el palio e inclinándose dice:

 

 

 

 

 

 

 

 

Y bendiciendo las ofrendas, el Celebrante continúa:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

SEGUNDA INCENSACIÓN
(Se omite en las misas rezadas)
Esta nueva incensación tiene por objeto honrar el Cáliz y la Hostia ofrecidos, el altar, el Celebrante, los Ministros sagrados, y todos los fieles asistentes, envolviéndolo todo en una misma oleada de fervorosa oración.
Antes de hacer uso del incienso, el Celebrante lo bendice diciendo:

 

 

 

 

 

 

 

 

Empieza por incensar las ofrendas, diciendo:

 

 

 

 

 

Ahora inciensa el Crucifijo y el altar, diciendo:
SALMO 140

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Y al entregar el incienso al Diácono, le dice:

 

 

 

 

 

 

 

Y el Diácono inciensa al Celebrante y a los Ministros, y si hay Coro, al clero, y el turiferario inciensa con tres golpes al pueblo en general.


13. - Lavatorio de las manos
El Celebrante, aunque tiene el alma limpia, y las manos limpias, se  lava estas, para expresar el deseo que tiene de la pureza interior, tan necesaria para tratar con Dios, fente al cual toda pureza es poca.

Entonces se dirige al lado de la Epístola , donde le espera el acolito con el lavabo. Entre tanto reza el Salmo 25.

 

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

*El gloria se omite en las misas de difuntos y en el tiempo de Pasión.

14. - Recomendación de la Hostia y del Cáliz
Volviendo al medio del altar e inclinado, el sacerdote recomienda a la Sma. Trinidad el Sacrificio que está celebrando para gloria de Dios, honra de los Santos y provecho de los hombres, diciendo:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Comentario: Antes de dar comienzo a la parte mas importante de la Misa, el sacerdote se vuelve de cara al pueblo, pidiendo con insistencia las oraciones de los fieles

Y el pueblo le responde, orando por él, en estos términos:
Todos:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

16. - Oración-Secreta
(Cambia cada día y se encuentra en el Propio del Misal)
La Oración-Secreta puede ser una, dos, tres, o más, según haya sido el número de las "Colectas"

2ª DIVISIÓN. - LA CONSAGRACIÓN
17. - Prefacio
(El prefacio cambia en algunas festividades)
A modo de introducción, entre Celebrante y monaguillo (o el coro en las Misas cantadas), se entabla el siguiente diálogo:

 

Comentario: Levantamos el espíritu hasta el Cielo, hasta el acatamiento de la Divinidad, y penetrado allí de un santo y respetuoso temor a la vista de la Trinidad, rendimos homenajes y mezclamos nuestras alabanzas con los celestiales cánticos de los ángeles y querubines que le rodean.

 

S: Deus, Xqui humanae substantiae dignatem mirabiliter condisti, et mirabilius reformasti: da nobis per hujus aquae et vini mysterium, ejus Divinitatis esse consortes, qui humanitatis nostrae fieri dignatus est particeps, Jesus Christus, Filius tuus, Dominus noster. Qui tecum vivit et regnat in unitate Spiritus Sancti Deus: per omnia saecula saeculorum. Amen.

 

 

 

 

 

 

S: Oh Dios, Xque maravillosamente formaste la naturaleza humana y mas maravillosamente la reformaste: haznos, por el misterio de esta agua y vino, participar de la divinidad de Aquel que se digno hacerse participante de nuestra humanidad, Jesucristo, tu Hijo Señor nuestro, que, Dios como es, contigo vive y reina en unidad del Espíritu Santo, por todos los siglos de los siglos. Así sea.

Oferimus tibi, Domine, calicem salutaris, tuam deprecantes clamentiam: ut in conspectu divinae Majestatis tuae, pro nostra et totius mundi salute cum odore suavitatis ascendat. Amen.

Te ofrecemos, Señor, el Cáliz de salvación, implorando de tu clemencia que llegue en olor de suavidad hasta el acatamiento de tu Divina Majestad, para nuestra salvación y la de todo el mundo. Así sea.

S: In spiritu humilitatis et in animo contrito suscipiamur a te, Domine: et sic fiat sacrificium nostrum in conspectu tuo hodie , ut placeat tibi, Domine Deus.

S: Recíbenos, Señor, animados de un espíritu humilde y de un corazón arrepentido: y tal efecto produzca hoy nuestro sacrificio en tu presencia, que del todo te agrade, oh Señor y Dios nuestro!

VENI  SANTIFICATOR  omnipotens aeterne Deus: et bene X dic hoc sacrificium tuo Sacto Nomini praeparatm.

VEN, OH DIOS SANTIFICADOR omnipotente y eterno, y ben X dice este sacrificio preparado para gloria de tu Santo Nombre!

Per intercessionem beati Michaelis Archangeli, statis a dextris altaris incensi, et omnium electorum suorum, incensum istud dignetur Dominus bene X dicere, et in odorem suavitatis accipere. Per Christum dominum nostrum. Amen

Por la intercesión de San Miguel Arcángel, que asiste a la diestra del altar de los perfumes, y de todos sus elegidos, dignese el Señor benX decir este incienso y recibirlo en olor de suavidad. Por Jesucristo Nuestro Señor. Así sea.

Incensum istud a te benedictum, ascendat ad te, Domine, et descendat super nos misericordia tua.

Suba, oh Señor, hasta Ti este incienso que Tú has bendecido, y descienda sobre nosotros tu misericordia.

Dirigatur, Domine, oratio mea sicut incensum in conspectu tuo: elevatio manuum mearum sacrificium vespertinum. Pone, Domine, custodiam ori meo, et ostium circumstatiae labiis meis; ur non declinet cor meum in verba malitiae, ad excusandas escusationes in peccatis.

 

Suba mi oración, oh Señor, como sube este incienso; valga la elevación de mis manos como el sacrificio vespertino. Pon, oh Señor, guarda a mi boca y un candado a mis labios, para que mi corazón no se desahogue con expresiones maliciosas, buscando cómo excusar mis pecados.

Ascendat in nobis Dominus ignem sui amoris, et flamman aeternae caritatis. Amen.

 

Encienda el Señor en nosotros el fuego de su amor y la llama de su eterna caridad. Así sea.

 

LAVABO inter innocentes manus meas: et circumdabo altare tuum, Domine
Ut audiam vocem laudis: et enarrem universa mirabilia tua.
Domine, dilexi decorem domus tuae: et locum habitationis gloriae tuae.
No perdas cum impiis, Deus animam meam: et cum viris sanguinum vitam meam.
In quorum manibus iniquitqtes sunt: dextera eorum repleta est muneribus.
Ego autem in innocentia mea ingressus sum: redime me, et miserere mei.
Pes meus stetit in directo: in ecclesiis benedicam te, Domine.
*Gloria Patri …

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Sicut erat ...

LABARE mis manos entre los inocentes; y me pondré oh Señor, al servicio de tu altar. Para hacerme eco de los cánticos de alabanza, y proclamar todas tus maravillas.

Yo he amado, oh Señor, el decoro de tu casa, y la mansión de tu

gloria.
No pierdas, Dios mío, mi alma con los impíos, ni mi vida con los hombres sanguinarios.
Cuyas manos están manchadas de maldad, y su diestra cargada de sobornos.
Yo, en cambio, he procedido con inocencia; líbrame Tu y ten piedad de mi.
Mi pie ha andado por el camino recto: por lo que podré alabarte, oh Señor en las asambleas de los fieles.
*Gloria al Padre ... Como era ...

SUSCIPE SANCTA TRINITAS, hanc oblationem, quam tibi offerimus ob memoriam passionis, resurrectionis, et ascensionis Jesu Christi Domini nostri: et in honorem beatae Mariae semper virginis, et beati Joannis Baptistae, et sanctorum Apostolorum Petri et Pauli, et istorum, et omnium Sanctorum: ut illis proficiat ad honorem, nobis autem ad salutem, et illi pro nobis intercedere dignentur in coelis, quorum memoriam agimus in terris. Per eumdem Christum Dominum nostrum. Amen

RECIBE, OH SANTA TRINIDAD, esta oblación que te ofrecemos en memoria de la Pasión, Resurrección y Ascensión de Nuestro Señor Jesucristo y en honor de la bienaventurada siempre Virgen Maria, del bienaventurado San Juan Bautista y de los Santos Apostóles San Pedro y San Pablo, y de éstos y de todos los Santos; para que a ellos les sirva de honor y a nosotros nos aproveche para la salvación, y se dignen interceder por nosotros en el cielo aquellos de quienes hacemos memoria en la tierra. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor. Así sea.

15. - Intercambio de oraciones
El sacerdote besa el altar, se vuelve hacia el pueblo y, abriendo y cerrando los brazos como para abrazar a todos en nombre de Cristo, cuyas veces está haciendo, se encomienda a sus oraciones diciendo:

ORATE fratres: ut meum ac vestrum sacrificium acceptabile fiat apud Deum Patrem omnipotens.

 

ORAD, hermanos, a fin de que mi sacrificio y el vuestro, sea aceptado en el acatamiento de Dios, Padre omnipotente

Suscipiat Dominus sacrificium de manibus tuis ad laudem et gloriam nominis sui, ad utilitatem quoque nostram, totiusque Ecclesiae tuae sanctae.

El Señor reciba de tus manos este Sacrificio, para alabanza y gloria de su nombre, y para nuestro provecho y el de toda su Santa Iglesia. Amen.

S: Per omnia saecula saeculorum
M: Amen.
S: Dominus vobiscum.
S: Sursum corda.
M: Abemus ad Dominum.
S: Gratias agamus Domino Deo nostro.
M: Dignum et justum est

S: Por todos los siglos de los siglos
M: Así sea.
S: El Señor sea con vosotros.
S: ¡Arriba los corazones!
M: Ya los tenemos unidos al Señor
S: Demos gracias al Señor Dios nuestro.
M: Digno y justo es.

Prefacio de los domingos ordinarios

VERE dignum et justum ets aequum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, aeterne Deus. Qui cumm unigenito Filio tuo, et Spiritu Sancto, unus es Deus, unus es Dominus: non in unius singularitate personae, sed in unius Trinitate substantiae. Quod enim de tua gloria, revelante te, credimus, hoc de Filio tuo, hoc de Spiritu Sancto, sine differentia discretionis sentimus. Ut in confessione verae, sempiternaeque Deitatis, et in personis Proprietas, et in essentia unitas, et in majestate adoretur aequalitas. Quam laudat Angeli atque Arcangeli, Cherubim quoque ac Sraphim: qui non cessant clamare quotidie, una voce dicentes:

VERDADERAMENTE es digno y justo, equitativo y saludable, que te demos gracias en todo tiempo y lugar oh Señor Santo, Padre todopoderoso y eterno Dios! Quien, con tu Hijo unigénito y el Espíritu Santo, eres un solo Dios, eres un solo Señor: no en la unidad de una sola persona, sino en la Trinidad de una sola sustancia. Porque cuanto creemos, por habérnoslo Tu revelado, acerca de tu gloria, creémoslo igualmente de tu Hijo, y del Espíritu Santo, sin haber diferencia ni separación. De modo que, al reconocer una sola verdadera y eterna Divinidad, sea también adorada la propiedad en las personas, la unidad en la esencia y la igualdad en la majestad. A la cual alaban los Ángeles y los Arcángeles, los Querubines y los Serafines, que no cesan de cantar diariamente, diciendo a coro:

SANCTUS, SANCTUS, SANCTUS,  Dominus Deus Sabaoth. Pleni sunt caeli, et terra gloria tua. Hosanna in excelsis.

X Benedictus qui venit in nomine Domini. Hosanna in excelsis.

SANTO, SANTO, SANTO,  es el Señor Dios de los Ejércitos. Llenos están los cielos y la Tierra de tu gloria. Hosanna en las alturas:

X Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en las alturas.

Aqui se escucha tres veces la campanilla. Y dicen todos de rodillas

 

Comentario:  Antes de llegar el momento mas solemne y augusto de la Misa, o sea la consagración, el sacerdote sale de su recogimiento y alza la voz y las manos para publicar la grandeza de Dios, tres veces santo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

CANON MISSAE

El Canon es como el corazón del Santo Sacrificio. Los Ángeles se unen en torno al sacerdote, a quien rodean con temor y reverencia. Ahora la voz del celebrante disminuye hasta casi el silencio, pues se acerca el gran momento en el que Ntro. sr. Jesucristo se hará presente en el Altar.

Las oraciones de esta parte de la Misa se dicen por regla fija. Ellas son invariables en todas las misas.


18. - Plegaria por la Iglesia
El Celebrante, levantando los brazos y los ojos hacia el Crucifijo, como para acercárselo más a Cristo y mejor identificar el Calvario con el Altar, reza profundamente inclinado y en silencio:

Comentario: Ese Altar al cual va a bajar Jesucristo, considéralo como el trono de su misericordia, al que tenemos derecho de acercarnos para exponer todas nuestras necesidades y para pedir y alcanzar socorros. ?Podría negarnos alguna cosa el Dios que nos ha entregado a su propio Hijo? En el Canon tenemos seis mementos y cinco oraciones de ofrenda, las unas antes, las otras después de la consagración . Todo está recordado allí.

 

TE IGITUR, CLEMENTISSIME PATER , per Jesum Christum Filium tuum Dominum nostrum, supplices rogamus ac petimus, uti accepta habeas, et benedicas, haec X dona, haec X munera, haec X sancta sacrificia illibata, in primis, quae tibi offerimus pro Ecclesia tua sancta catholica: quam pacificare, custodire, adunare, et regere digneris toto orbe terrarum: unacum famulo tuo Papa nostro N. et Antistite nostro N. et omnibus orthodoxis, atque cattholicae et Apostolicae fidei cultoribus.

TE PEDIMOS PUES, Y HUMILDEMENTE TE ROGAMOS, OH PADRE CLEMENTISIMO, por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que recibas y bendigas estos Xdones, estas Xofrendas y estos  Xsantos y puros sacrificios; que te ofrecemos, en primer lugar, por tu Santa Iglesia católica, para que te dignes darle la paz, guardarla, unificarla, y gobernarla en toda la redondez de la tierra, juntamente con tu ciervo el Papa N., nuestro Prelado N., y todos los que profesan la verdadera fe católica y apostólica.

19. - "Memento" de los vivos
El Celebrante extiende y junta las manos mirando al Crucifijo, reza las primeras palabras de la siguiente oración (hasta N., N.), y, después de una breve pausa, para encomendar a algunas personas en particular y nominalmente, prosigue lo demás.

Comentario: El primer fruto de la Misa es para “todos los aquí presentes”, el segundo es para los ausentes. Con ambos tenemos un deber que cumplir, por encima del egoísmo de nuestras propias necesidades. Aquí nombraras a las personas por las cuales especialmente ofreces la Misa, o la gracia especial que con ellas deseas conseguir.

Memento Domine famulorum, famularumque tuarum N. et N. (se hace una pausa y el sacerdote menciona , para sí mismo ciertos nombres e intenciones)  et omnium circumstantium, quorum tibi fides cognita est, et nota devotio, pro quibus tibi offerimus: vel qui tibi offerunt hoc sacrificium laudis pro se, suisque omnibus: pro redemptione animarum suarum, pro spe salutis et incolumitatis suae : tibique reddunt vota sua aeterno Deo vivo et vero.

Acuérdate, Señor, de tus siervos y siervas N. y N...., y de todos los circunstantes, cuya fe y devoción te son conocidos; por los que te ofrecemos, o que ellos mismos te ofrecen, este sacrificio de alabanza, por sí y por todos los suyos, por el rescate de sus almas, y por su salud y bienestar corporal; y que también te tributan sus homenajes a Ti, Dios eterno, vivo y verdadero.

20. - Conmemoración de los Santos
Comentario: Para que la oración de la Iglesia militante sea mejor atendida por Dios Padre, invoca ahora el Celebrante la intercesión de la Sma. Virgen y de los Santos de la Iglesia triunfante, en cuyo honor se ofrece también este Sacrificio.

COMMUNICANTES, et memoriam venerantes, in primis gloriosae semper virginis Mariae genitricis Dei et Domini nostri Jesu Christi: sed et beati Joseph, ejusdem virginis sponsi et beatorum Apostolorum ac martyrum tuorum, Petri et Pauli, Andreae, Jacobi, Joannis, Thomae, Jacobi, Philippi, Bartholomaei, Matthaei, Simonis et Thaddaei: Lini, Cleti, Clementis, Xysti, Cornelii, Cypriani, Laurentii, Chrysogoni, Joannis et Pauli, Cosmae et Damiani, et omnium sanctorum tuorum: quorum meritis precibusque concedas, ut in omnibus protectionis tuae muniamur auxilio. Per eumdem Christum Dominum nostrum. Amen.

UNIDOS por la comunión de los Santos*** y honrando , primeramente, la memoria de la gloriosa siempre Virgen María, Madre de Jesucristo, Señor y Dios nuestro, y la de tus bienaventurados Apóstoles y Mártires: Pedro y Pablo, Andrés, Santiago, Juan, Tomás, Santiago, Felipe, Bartolomé, Mateo, Simón y Tadeo, Lino, Clemente, Sixto, Cornelio, Cipriano, Lorenzo, Crisogono, Juan y Pablo, Cosme y Damián, y de todos tus Santos; te pedimos, por sus meritos e intercesión, nos concedas ser fortalecidos en todo con el auxilio de tu protección. Por el mismo Jesucristo N. S. Así sea

21. - Jesucristo, nuestra Víctima
Cumplido el deber de caridad de encomendar a Dios a la Iglesia militante y triunfante, el Celebrante concentra toda la atención sobre el Cáliz y la Hostia, y extiende sobre ellos ambas manos como para descargar sobre Jesucristo todos nuestros pecados y responsabilidades y constituirlo nuestra Víctima.

Se escucha la campanilla tres veces .

 

Comentario: Las oraciones de ofrenda antes de la consagración simbolizan la costumbre de La Antigua Ley de colocar los propios pecados sobre una cabrita, que luego era desterrada al desierto y abandonada para que muriera. Ahora nosotros colocamos nuestros pecados sobre la cabeza de Jesús, Víctima de ellos para que nos salve.

HANC igitur oblationem servitutis nostrae, sed et cunctae familiae tuae, quaesumus, Domine, ut placatus accipias : diesque nostros in tua pace disponas, atque ab aeterna damnatione nos eripi, et in electorum tuorum jubeas grege numerari. Per Christum Dominum nostrum. Amen.

POR lo mismo, Señor, te rogamos te dignes admitir favorablemente esta ofrenda en testimonio de nuestra dependencia y de toda tu familia: y hacer que pasemos, en paz contigo, los días de nuestra vida, que nos veamos libres de la condenación eterna y seamos por Ti incluidos en el número de tus escogidos. Por Jesucristo Nuestro Señor. Así sea.

El Celebrante hace algunas señales de la cruz sobre el pan y el vino. El monaguillo toca la campanilla y, en las Misas rezadas, sube a la grada para levantar la casulla desl sacerdote, facilitándole así sus movimientos.

QUAM  oblationem tu, Deus, in omnibus, quaesumus benedictam X adscriptamX , ratam X rationabilem, acceptabilemque facere digneris: ut nobis Corpus X et Sanguis X fiat dilectissimi Filii tui Domini nostri Jesu Christi.

LA cual ofrenda, suplicamosté, oh Dios, te dignes ordenar sean ben X dita, adscri X ta, ratifi X cada, racional y agradable: de suerte que se convierta, para nuestro provecho, en el Cuer X po y San Xgre de tu muy amado Hijo Jesucristo, Nuestro Señor.

***• 1. El día de Navidad y durante su Octava, en el lugar señalado por los tres asteriscos, se añade: *** y celebrando el día sacratísimo en que la inmaculada virginidad de María Santísima dio a luz al mundo al Salvador; y honrando, primeramente, etc. (sigue arriba)
• 2. El día de Epifanía y durante su Octava, se añade: *** y celebrando el día sacratísimo en que tu Hijo Unigénito, coeterno contigo en tu gloria, apareció visiblemente en la realidad de nuestra carne corporal; y honrando, primeramente, etc. (sigue arriba)
• 3. El día de Pascua y durante su Octava, se añade: *** y celebrando el
día sacratísimo de la Resurrección de N. Señor Jesucristo, según la carne; y honrando, primeramente, etc. (sigue arriba)
• 4. El día de la Ascensión y durante su Octava, se añade: *** y celebrando el día sacratísimo en que Nuestro Señor, tu Hijo Unigénito, colocó a la diestra de tu gloria a nuestra frágil naturaleza unida en Él a su Divinidad; y honrando, primeramente, etc. (sigue arriba)
• 5. El día de Pentecostés y durante su Octava, se añade: *** y celebrando el día sacratísimo de Pentecostés, en que el Espíritu Santo se apareció a los Apóstoles en forma de innumerables lenguas; y honrando
, primeramente, etc. (sigue arriba)

Consagración del Pan.

QUI pridei quan pateretur, accepit panen in

Sanctas ac venerabiles manus suas: et elevatis oculis in caelum ad te Deun Patrem suun omnipotentem, tibi gratiasagens, beneX dixit, fregit deditque discipulis suis, dicens: Accipite, et manducate ex hoc omnes.

HOC EST ENIM CORPUS MEUM.

Consagración del Pan

EL cual la víspera de su pasión, tomo el

 Pan en sus santas y venerables manos, y levantando sus ojos al cielo, a Ti Dios

 Padre suyo Todopoderoso, dándote gracias, X lo bendijo, lo partió y lo dio

a sus discípulos, diciendo:“Tomad y comed todos de el,

POR QUE ESTE ES MI CUERPO"

El sacerdote hace la genuflexión, eleva la Hostia, y la campanilla suena tres veces

Todos miran la sagrada Hostia y dicen en silencio “Señor Mío y Dios mío”  (7 anos de indulgencia)

 

Comentario:  Ya se obró el gran milagro. Con las palabras de la consagración , el pan de la hostia se ha convertido en el Cuerpo de Jesucristo viviente . Es el mismo Dios, adórale con la mas profunda reverencia. A continuacion ocurrirá lo mismo con el vivo, convertido en la Preciosísima Sangre, derramada por nosotros.

Consagración del Vino.

SIMILI modo postquam coenatum est, accipiens at hunc praeclarum Calicem in sanctas ac venerabiles manus suas:

 iten tibi gratias agens, bene X dixit,

deditque discipulis suis, dicens: Accipite,

 et bibite ex eo omnes.

HIC EST ENIM CALIX SANGUINIS MEI, NOVI ET AETERNI

TESTAMENTI: MYSTERIUM FIDE: QUI PRO VOBIS ET PRO MULTIS

EFFUNDENTUR IN REMISIONEM PECCATORUM.

Haec quotiescumque feceritis, in mei

 memoriam facietis

Consagración del Vino.

DE un modo semejante, acabada la Cena, tomando este precioso Cáliz en sus santas y venerables manos, dándote gracias, lo

 bendijo  X, y dio a sus discípulos

diciendo: “Tomad y bebed todos de el,

PORQUE ESTE ES EL CALIZ DE MI SANGRE, DEL NUEVO Y ETERNO

 TESTAMENTO: MISTERIO DE FE: QUE SERA DERRAMADA POR

VOSOTROS Y POR MUCHOS PARA EL PERDON DE LOS PECADOS.

Cuantas veces hiciereis estas cosas

 las haréis en memoria mía.

El sacerdote hace la genuflexión, eleva en Cáliz, y la campanilla suena tres veces. Todos miran devotamente el Cáliz y dicen en silencio: “Y por eso te rogamos que socorras a tus siervos a quienes redimiste con tu preciosa Sangre.” ( 300 dias de indulgencia)

 

Comentario: Instantáneamente las substancias del pan y del vino se han cambiado en Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre. La persona del sacerdote desaparece. Es Cristo quien habla por labios de su ministro  y se ofrece por manos de el a su Padre por nosotros. ¿Cómo muere ahora Jesús  y como renueva su sacrificio? En el calvario murió físicamente Por la separación de su Cuerpo y de su Sangre. En  el Altar muere místicamente, puesto que las palabras de la Consagración son como una espada, que místicamente separan su Cuerpo de su Sangre por las dos consagraciones distintas.

 

Oraciones de ofrenda.

Después de la consagración.

El sacerdote extiende las manos y continua:

Unde et memores, Domine, nos servi tui, sed et plebs tua sancta, ejusdem Christi Filii tui  Domini  nostri tam beatae

 Passionis, nec non et ab inferis Resurrectionis, sed et in caelos gloriosae Ascensionis: offerimus praeclarae majestati tuae de tuis

 donis ac datis, HostiamX  puram, HostiamX  sancta,  Hostiam  X inmaculata , Panen X sanctum vitae aeternae et

 Calicem X Salutis perpetuae.

SUPRA quae propitio ac sereno vultu respicere digneris: et accepta  habere, sicut acepta habere dignatus es munera pueri tui justi

 Abel, et sacrificium Patriarchare nostri Abrahae: et quod tibi obtulit summus sacerdos tuus Melchisedech, santum sacrificium,

 inmaculatam hostiam.

Por esto recordando, Señor, nosotros siervos tuyos, y tamben tu pueblo santo, la bienaventurada pasión del mismo Jesucristo, tu Hijo Señor Nuestro y su Resurrección de entre los muertos, como también su gloriosa Ascensión a los cielos: ofrecemos a tu excelsa Majestad de

tus mismos dones y dadivas, ; la Hostia X Pura, la Hostia X Santa,  la Hostia X Inmaculada el Pan Santo X de la Vida eterna,

y el Cáliz X de perpetua salvación.

SOBRE los cuales dígnate, Señor, mirar con rostro propicio y sereno, y aceptarlos, como te dignaste aceptar los dones del justo Abel, y el sacrificio de nuestro patriarca Abrahán; y el que te ofreció tu sumo sacerdote Melquiseded: sacrificio Santo, Hostia Inmaculada.

Comentario: El sacerdote hace la señal de la cruz cinco veces para indicar que Cristo está en la Cruz y para bendecir a los fieles unidos a Cristo en el altar.                   

 

   El sacerdote se inclina profundamente y junta las manos sobre el altar

Supplices te rogamos, omnipotensDeus: jube  haec preferí per manus sancti Angeli tui in sublime altare tuum, in

conspectus Divinae majestatis tuae:

 ut quotquot, ex hac altaris participatione

 sacrosantum Filli tui, Cor X pus et San X guinem

 sumpserimus, omni beneddictione caelesti

 et gratia repleamur. Per eumdem Christum

Dominum nostrum. Amen.

 Suplicamosté Humildemente, Dios Omnipotente, mandes que sean llevados estos dones por manos de tu Santo Ángel a tu sublime altar del cielo, ante la presencia de tu divina majestad, para que (el sacerdote besa el altar) todos los que, participamos de este altar recibiéremos el Sacrosanto X Cuerpo y  X Sangre de tu Hijo, seamos colmados de toda bendición y gracia celestial. Por el mismo Cristo, Nuestro Sr. Amen.

 

Comentario: El canon repasa toda la historia, se refiere ahora, a las figuras de Cristo en el Antiguo Testamento y luego a la realidad misma. Al decir que “estas ofrendas sean llevadas” se refiere a los meritos infinitos de Cristo, Ntro. Sr. y también a nuestras humildes ofrendas.

 

                                      Cuarto memento. Las almas del Purgatorio.

Despues de haber hecho memoria de los misterios mas grandes de la vida del Salvador, y de rezar, profundamente inclinado, elevadisimas oraciones, el sacerdote se recoge, en esta ocasion para hacer memoria de los difuntos y encomendarles a Dios, a lo que todos nos unimos.

 

Comentario: Antes de la Consagración recordamos a la Iglesia Militante e invocamos a la Triunfante; ahora ofrecemos la Sangre preciosa por la Iglesia paciente, por nuestros muertos conocidos y olvidados.

MEMENTO etiam, Domine,famulorum, famularumque tuarum N. et N. qui nos praescesserunt cum signo fifei et dormiunt in somno pacis.

                Ipsis, Domine, et ómnibus in Christo quiescentibus, locum refrigertii, lucis et pacis, ut indulgeas, deprecamur.

Per eumdem Christum Dominum nostrum. Amen.

ACUERDATE también, Señor, de tus siervos N. et N. que nos precedieron con la señal de la fe, y duermen el sueno de la paz.

                 Te pedimos, Señor, que a estos y a todos los que descansan en Cristo, les concedas el lugar del refrigerio, de la luz y de la paz.

Por el mismo Cristo, Ntro. Sr. Amen.

A continuación el sacerdote levanta la voz durante las tres primeras palabras invitando a confesar los pecados. Los santos se han santificado en todos los estados de la vida: apóstoles, sacerdotes, laicos y vírgenes, mujeres casados, y esto ha de servirnos de estimulo y esperanza, para que nosotros podamos un dia gozar de su compañía.

 

                                        Quinto memento. Los Pecadores.

El sacerdote se da golpes de pecho y dice en alta voz las tres primeras palabras de la oración siguiente.

NOBIS quoque peccatoribus famulis tuis,

 de multitudine miserationum tuarum sperantibus, partem aliquam et societatem donare digneris, cum tuis sanctis Apostolis et Martyribus: cum Joanne, Stephano, Mathia,

Barnaba, Ignacio, Alexandro, Marcelino,Petro,

Felicitate, Perpetua, Agatha, Lucia, Agnete, Caecilia, Anastasia, et omnibus sanctis tuis: intra quorum nos consortium,

non aestimator meriti, sed veniae, quaesumus, lagitor admitte. Per Christum Dominum nostrum.

 

 

 

 

 

TAMBIEN a nosotros pecadores siervos tuyos, que

 esperamos en la abundancia de tus misericordias,

 dígnate darnos siquiera alguna partecita y vivir en

 compañía de tus santos Apóstoles y Mártires: Juan,

 Esteban, Matías, Bernabé, Ignacio, Alejandro,

Marcelino, Pedro, Felicidad, Perpetua, Águeda,

 Lucia, Inés, Cecilia, Anastasia, y de todos tus

 santos: en cuyo consorcio te pedimos nos recibas,

no por nuestros meritos, sino como perdonador

que eres de nuestras culpas. Por Cristo Ntro. Sr.

                                        Sexto Memento. Toda la Naturaleza.

Antiguamente se bendecían los alimentos en la Santa Misa; ahora se da esta bendición fuera de ella.

El sacerdote descubre el Cáliz y hace la señal de la Cruz 5 veces con la hostia y eleva ambos para ofrecerlos al Eterno Padre.

PER quem haec omnia, Domine, semper bona

 creas, sanctiX ficas, viviX ficas, beneX dicis et praestas nobis.

 

 PERX IPSUM, ET CUMX IPSO,ET IN X IPSO est

Tibi Deo Patri X omnipotente, in úntate SpiritusX Sancti, omnis honor et gloria. Per omnia seacula saeculorum. Amen.

 

 

POR el cual creas siempre, Señor, todos estos bienes, los X santificas, los X vivificas, los X bendices y nos lo repartes.

 

POR  X EL MISMO, Y CON X EL MISMO Y EN X EL MISMO, A TI DIOS PADRE X TODOPODEROSO, EN UNIDAD DEL X ESPIRITU SANTO, TODA HONRA Y GLORIA.  POR TODOS LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS. AMEN.

 

 Termina el canon con el ofrecimiento que se hace al Padre del sacrificio de Jesús y de todas las cosas de la naturaleza.

 

Comentario: “estos bienes” Aquí se refiere al pan y al vino que han venido a ser el Cuerpo y la Sangre de Cristo . También todas las cosas de la naturaleza son creadas, santificadas, y vivificadas como una fuente de vida divina para nosotros. “Por El” porque Cristo es nuestro mediador; “Con El”  nos unimos para rendir homenaje al Padre, fuente de todo bien; “En El”, puesto que le estamos incorporados por el bautismo. “Todo honor y toda gloria”; los seis mementos se ofrecen ahora al Padre.

 

Comentario: He aquí pronto a nuestro Dios, nuestro Salvador y Justo juez. Nos recogemos en silencio como sobrecogidos de admiración considerando lo que sucede en el altar . Excitamos nuestro fervor y entregamos nuestros sentimientos al mas absoluto respeto y reverencia , que la confianza y el temor son capaces de inspirar.

 

Gregorio XIII el 10 de Abril de 1580, concede perpetuamente a los fieles un anoo de indulgencia por cada vez que al son de la campana , en senal de la elevacion del Santisimo Sacramento, adoren al Senor, en dondequiera que se hayen incados de rodillas, y dos annos si esta adoracion se lleva a cabo en la misma Iglesia donde tiene lugar la consagracion.

Cuadro de texto: CONTINUACION.##

 JUZGAME oh Dios y defiende mi causa contra la gente malvada: del hombre perverso y engañador líbrame.
M. Siendo tu, oh Dios, mi fortaleza como me siento yo desamparado, y porque ando triste al verme molestado por mi enemigo? -
S. Envíame tu luz y tu verdad: ellas me han de guiar y conducir a tu santo monte, y a tu morada del Cielo
M. Y entrare al altar de Dios: hasta Dios que es la alegría de mi juventud.
S. Y te alabare con la citara, oh Dios , Dios mío: por que estas triste, alma mía, t por que me turbas?
M. Espera en Dios; pues aun he de celebrarte como a mi Dios y Salvador.
S. Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo
M. Como era en un principio y ahora y siempre y en los siglos de los siglos. Amen
S. Entraré al altar de Dios
M. Hasta Dios, que alegra mi juventud.
S. Nuestro socorro esta en el Señor,
M. Que hizo el cielo y la tierra.

 

 

                                                                         

 

 

 

 

 

ORDO MISSAE

1962

10. - Ofrecimiento de la Hostia
El sacerdote descubre el cáliz, toma la patena con la Hostia y ofreciéndola dice:

SUSCIPE, SANCTE PATER, omnipotens aeterne Deus, hanc immaculatam Hostiam, quam ego indignus famulus tuus offero tibi, Deo meo vivo, et vero, pro innumerabilibus peccatis, et offensonibus, et negligentilis meis, et pro omnibus circunstatibus, sed et pro omnibus, fidelibus christianis: ut mihi et illis proficiat ad salutem in vitam aeternam. Amen

RECIBE, OH PADRE SANTO omnipotente y eterno Dios, Hostia inmaculada y que yo, indigno siervo tuyo, te ofrezco a Ti, mi Dios vivo y verdadero, por mis innumerables pecados, ofensas y negligencias, y por todos los circunstantes, así como también por todos los fieles cristianos vivos y difuntos; a fin de que a mí y a ellos nos aproveche para la salvación y vida eterna. Así sea.